
Hace diez años, el 29 de enero de 2015, las autoridades de aviación de Malasia publicaron su informe final sobre la desaparición sin dejar rastro de un Boeing 777 de Malaysia Airlines, ocurrida más de un año antes. Lo calificaron como un «accidente», pero no pudieron pruebas que lo demostraran. Las especulaciones, los 239 fallecidos, las teorías increíbles y la hipótesis del piloto suicida.

Se contaban diez meses y 21 días desde que la aeronave de Malaysia Airlanes, un Boeing 777, considerado uno de los aviones más seguros del mundo, desapareciera sin dejar rastros con 239 personas a bordo en algún lugar del trayecto entre Kuala Lumpur, en Malasia, y Beijing, China, cuando obligado por presiones y urgencias legales, el Departamento de Aviación Civil de Malasia dio a conocer el comunicado. “Declaramos oficialmente que el vuelo MH370 de Malaysia Airlines fue un accidente y que se presume que los 239 pasajeros y tripulantes a bordo perdieron sus vidas”, decía el texto firmado por su director, Azharuddin Abdul Rahman.
El almanaque marcaba el jueves 29 de enero de 2015 y ya no quedaban posibilidades de postergar el dictamen que, según los reglamentos de Aviación Civil Internacional, era imprescindible para que los familiares de las víctimas pudieran cobrar las indemnizaciones. También era una de cerrar, por lo menos de manera oficial, la investigación de uno de los mayoresios de la historia de la aviación comercial. Porque, en realidad, nadie podía afirmar con certeza que la desaparición del Boeing malayo, ocurrida el 8 de marzo del año anterior, fuera «un accidente». No había pruebas que lo confirmaran, pero tampoco datos ciertos que demostraran lo contrario. La suerte del vuelo MH370, sus 222 pasajeros y sus 17 tripulantes, seguía siendo un enigma sin resolver.
-Malaysia 370 contacta con Ho Chi Minh 120, buenas noches – fueron las últimas palabras del comandante de la aeronave, Zaharie Ahmad Shah, registradas en la grabación del control aéreo vietnamita.
-Buenas noches, Malaysia 370 – había contestado el controlador.
A partir de ese momento, todo fue silencio. Según los registros, el último contacto del avión con tierra se había producido exactamente a la 1:20 de la madrugada del 8 de marzo de 2014 en el huso horario correspondiente a la República Socialista de Vietnam. Más de once años después de esas últimas palabras y cuando se cumplen diez desde que las autoridades de la aviación malaya dieron a conocer el comunicado, la verdad sobre lo ocurrido con el vuelo MH370 está lejos de conocerse. En cambio, sobran las hipótesis contradictorias, las búsquedas fracasadas, una serie de hallazgos parciales que no revelan nada, las sospechas sobre restos del avión plantados deliberadamente en diferentes lugares, una teoría de suicidio, otra de terrorismo aéreo y hasta una versión que asegura que el avión fue secuestrado y desaparecido por extraterrestres. Las cajas negras de la aeronave comercial, capaces de revelar el misterio, nunca aparecieron.

Marzo de 2014. La sombra sobre el mar de un avión de Nueva Zelanda que participaba en la búsqueda de los restos del MH 370 en el Océano Índico (REUTERS/Rob Griffith)
Desaparecido en el aire
Era un vuelo corto, de poco más de cinco horas. El Boeing 777-200ER, modelo 2H6ER, de Malaysia Airlines despeg a tiempo a las 00:41 de la madrugada del 8 de marzo, desde el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur. El vuelo, designado con el código MH370 de la aerolínea malaya y con el CZ748 por China Southern Airlines, tenía como destino el Aeropuerto Internacional de Beijing. Se trataba de un recorrido rutinario; ese trayecto, ida y vuelta, se realizaba más de una vez al día en una de las aeronaves de pasajeros más confiables del mundo.

Hasta ese día, el Boeing 777 tenía uno de los mejores récords de seguridad de la aviación. Desde su primer vuelo, en junio de 1995, solo se registraban dos incidentes graves protagonizados por ese modelo. En enero de 2008, 47 pasajeros resultaron heridos cuando cristales de hielo en el combustible del vuelo 38 de British Airways le hicieron perder potencia y aterrizar de emergencia en el Aeropuerto de Londres-Heathrow. En julio de 2013, tres pasajeros murieron y 181 resultaron heridos cuando un error del piloto causó el aterrizaje forzoso del vuelo 214 de Asian Airlines en la aproximación final al Aeropuerto Internacional de San Francisco. La mayoría de los expertos en aviación coincidía en que el 777 de Boeing era un avión casi perfecto en materia de seguridad.
En el momento del último contacto del comandante Zaharie Ahmad Shah con el control aéreo del Aeropuerto Internacional Ho Chi Minh, a la 1:20 de la mañana, el avión aparecía en el radar colando sobre el Mar de China, a pocos kilómetros de la frontera con Malasia. Minutos después su señal desapareció de las pantallas. A las 2:40, los controladores vietnamitas avisaron a Malaysia Airlines que el avión estaba desaparecido. El vuelo MH370 no emitió ninguna señal de socorro, ni reportes de mal tiempo ni de problemas técnicos y cuando se comunicó por última vez tenía combustible para casi ocho horas de vuelo, más que suficiente para llegar a su destino. Después de volar sobre Vietnam, el Boeing debía entrar en los espacios aéreos de Tailandia y de China. No hay registros de que lo haya hecho.Zaharie Ahmad Shah, piloto del vuelo MH370 de Malaysia Airlines
Una vez dada la alarma, las operaciones de búsqueda comenzaron casi de inmediato, primero con aeronaves y barcos chinos y malayos; en los días siguientes, una decena de países más aportarían recursos para buscarlo. Nadie lo encontró: el Boeing 777 de Malaysia Airlines se había esfumado sin dejar rastro.
EL misterio crecía.
A falta de rastros, sobraban las especulaciones. Para conocer las causas de un accidente aéreo son necesarias muchas pruebas: cajas negras, comunicaciones desde y hacia el avión, análisis de los restos del accidente, registros de seguridad de los aeropuertos, imágenes satelitales, entre muchas otras. En el caso del vuelo MH370 no había casi nada. Las investigaciones -porque no fue solo una, sino varias- avanzaron con lo que tenían y pronto aparecieron algunos datos, a veces apenas indicios, que permitieron elaborar algunas hipótesis bastante inciertas.
Los investigadores pusieron en foco la lista de pasajeros ante la posibilidad de que se tratara de un atentado. La revisión a fondo del registro, comprobando sus identidades más allá de la documentación que había presentado cada uno al embarcar, arrojó un primer dato sospechoso: dos de ellos habían utilizado pasaportes que resultaron falsos. Uno pertenecía a un ciudadano austríaco y otro a un italiano que tiempo atrás habían denunciado los robos en sus países de origen. Las dos personas que embarcaron con esos pasaportes -cuyas identidades hoy siguen siendo un misterio- habían comprado los boletos de avión en la misma agencia y al mismo tiempo, una razón más para sospechar de ellos.
Lo que no cuadraba era que sus antecedentes eran por robo y un ladrón no es lo mismo que un terrorista. En el supuesto caso de que uno o ambos sujetos estuvieran dispuestos a realizar un atentado suicida, se planteaban tres: que hubieran hecho estallar el avión con un artefacto explosivo no detectado por la seguridad del aeropuerto de Kuala Lumpur, que desde el interior del avión hubieran hackeado las computadoras de vuelo para hacerlo caer, o que hubieran intentado tomar el avión para perpetrar un atentado similar al de las Torres Gemelas contra un objetivo desconocido. No era imposible, pero en al menos dos de los tres casos, el piloto o el copiloto habrían tenido de avisar a los controladores en tierra y no lo habían hecho.A fines de 2024, el gobierno malayo anunció que iniciará un nuevo intento para hallar los restos del avión del vuelo MH370. La búsqueda estará a cargo de una empresa privada: Ocean Infinity (AP).
Se investigó también la posibilidad de que el avión sido derrado desde tierra o aire por un. Esa hipótesis se basaba en una espec fundamentos ciertos: que el Boeing se desvió de su ruta y voló cerca de la isla Diego García, en el Océano Índ, donde Estados Unidos tenía -y tiene- base de misiles. Ante presencia de un avión desconocido y el temor de que, como en el atentado contra las Torres Gemelas, sus tripulantes pudieran estrellarlo contra la base, le habrían disparado. gobierno estadounidense desmintió enfáticamente esta versión, pero como en el caso del vuelo 007 de Korean derribado por un misil soviético en septiembre de 1973, se trata de un escenario de guerra, la primera víctima es la verdad.
Tampocoaron las teorías delirantes, como que la tripulación había desviado el avión y aterrizado en un lugar desconocido para ser utilizado en un atentado terrorista en el futuro, o que el Boeing 777 sido abducido por una enorme nave extraterrestre y que por esa razón no se encontraban restos ni rastros de él. Los extraterrestres se lo habían llevado entero.
¿Otras teorías?
Posteriormente a la desaparición del Boeing 777 empezó a circular un video que registraba el momento justo de la desaparición avión en pleno vuelo al ser este rodeado por unas esferas que aparentemente abrieron un portal por el cual fue abducido. El misterio continua.
La filtración de presuntos videos y audios de la desaparición del vuelo MH370 de Malaysia Airlines causó conmoción en las redes sociales, donde muchos aseguran que los ovnis están involucrados.
Según relata el usuario de la red social X, recibió las pruebas y decidió compartirlas con el mundo con el propósito de ayudar.
Estos llamados de ayuda llegaron a un joven identificado como Tyler, quien no dudó en compartirlos, pero que luego de la desaparición habrían desaparecido extrañamente.
Sin embargo, este año fueron publicados y según el joven en el audio pueden escuchar una lista de palabras al azar: “Sierra, delta, alfa, november, gol, eco, romeo, sierra, oscar, sierra, india, tango, india, sierra, delta, india, romeo”.
Los mensajes decodificados del vuelo MH370 de Malaysia Airlines:
Los mensajes, que inicialmente parecían incoherentes, han sido decodificados por un joven que se topó con la publicación de Tyler. La traducción revela un mensaje de peligro y llamado de auxilio:
«PELIGRO, SOS, SE REQUIERE EVACUAR, NO SON HUMANOS, SOS, PELIGRO».
Estos mensajes también incluyen coordenadas, lo que ha desencadenado una nueva serie de teorías sobre la ubicación del avión y su destino final.
Teoría de la ubicación y posible ataque OVNI del vuelo MH370 de Malaysia Airlines
Según los reportes basados en las pruebas, los restos del vuelo MH370 podrían encontrarse en una región densamente vegetada en Indonesia, específicamente en Nagan Raya, Sumatra.
Esta área coincide con el punto exacto donde se perdió la señal del Boeing 777. Las teorías sugieren que las esferas vistas alrededor de la aeronave en el video podrían estar relacionadas con un ataque OVNI, lo que también explicaría otras desapariciones misteriosas en la misma zona en el pasado.
Pruebas sembradas para acallar a la opinión pública ante el misterio prevaleciente.
Con el paso de los años «se han encontrado 33 posibles piezas de Boeing 777 en seis diferentes países«, en aguas o tierras que en algunos casos están separadas por miles de kilómetros. No se tiene la certeza de que pertenezcan al avión perdido.
Hasta se hicieron varios documentales para presentar la historia del misterio del vuelo MH370 de Malaysia Airlines. Una de ellas producida por la National Geographic llevó el nombre de Drenando los mares.
Un misterio que prevalecerá durante mucho tiempo.
Todos los años se realizan homenajes a las víctimas del vuelo MH370 en (EFE/EPA/AHMAD YUSNI)
Más allá de las hipótesis y del misterio que rodea la desaparición del Boeing 777 de Malaysia Airlines, el caso sigue siendo un enigma sin resolver. Así lo reconoció incluso el Departamento de Aviación Civil de Malasia al presentar su informe final hace diez años, puesto que, al mismo tiempo que declaraba que se trataba de “un accidente”, también reconocía que no se podían “establecer con certeza las razones de la desaparición del avión con sus 239 personas a bordo”.