A los de a pie; ¡Sí nos importa México!

México es un país con gran potencial, el cual se encuentra amenazado por los actuales actores políticos, quienes, por su sed de poder, no han logrado estar a la altura para llevar al país hacia un desarrollo que permita contar con una clase media mayoritaria, donde la pobreza, en todos sus niveles, no represente más del 10 % y la pobreza extrema se elimine.
En el país en el que vivimos, los políticos que no usan el presupuesto, disfrazado de programas sociales para sumar votos, no tienen la capacidad de conectar con los ciudadanos. Los partidos que representan a las minorías no han sabido generar confianza ni conectar con la población; siguen con las mismas caras, las mismas mañas y las mismas promesas vacías, dejando en estado de indefensión a los mexicanos, quienes ahora somos víctimas de lo votado y de la mala gestión de las minorías para crear puentes de diálogo con el partido en el poder.

La gran mayoría, por no decir todos, no han sabido escuchar ni comprender la realidad que se vive en las calles los de a pie. No comprenden las marchas ni la razón de ellas, aunque la mayoría son realizadas por ciudadanos que actúan de forma desesperada, buscando ser escuchados, porque la transformación y el bienestar aún no se han materializado en justicia, seguridad o mejoría económica.

Pero eso sí: todos sacan provecho de la desgracia del pueblo, ya sea los de la izquierda, que politizan todo, o los oportunistas que se cuelgan de las protestas organizadas por ciudadanos.
El gobierno se ha equivocado con las madres buscadoras, con los agricultores y con el sector productivo a nivel nacional, e incluso con sus propios trabajadores; pero no puede cometer errores con los movimientos encabezados por los jóvenes, aquellos que se convierten en bandera de programas sociales como “Construyendo el Futuro” o similares.

Que no se olvide: son ellos, los jóvenes, los que levantan la voz, y la marcha de este próximo sábado 15 de noviembre marcará un punto de inflexión si queda claro que el mensaje es del pueblo y para el pueblo, y no solo de quienes viven de la política.

El mensaje que se dé el próximo sábado no diferirá de lo que se ha expresado en otros momentos: es un “¡ya basta!” a políticas absurdas, abuso del poder e inseguridad. Es el inicio de un movimiento apartidista impulsado por ciudadanos que buscan crear conciencia, detonar la participación ciudadana y poner fin al silencio indolente, enviando un llamado de atención a quienes nos gobiernan.

¿Qué espera la presidenta para dar un golpe en la mesa y exigir resultados, en lugar de tapar los hoyos después de las desgracias? ¿Acaso el Estado está en crisis y se ha convertido en un Estado fallido?

El pasado ya debería servir como un dato estadístico y de referencia, y no como pretexto o excusa de lo que se vive hoy. Han pasado 2,538 días desde que asumieron el poder y actualmente gobiernan 24 estados, lo que los hace completamente responsables del destino del país. Por ello, es crucial que dejen atrás los argumentos anti-neoliberales y den resultados.

Es importante que la clase política entienda que a los a pie “sí nos importa México”, y que el futuro depende únicamente de lo que hagamos en este presente. Por ello, el diálogo y los acuerdos serán la única herramienta capaz de construir un futuro cierto para el país.
Y que quede claro: “Con la rebelión nace la conciencia”, Albert Camus

Javier Agustín Contreras Rosales. Colaborador de Integridad Ciudadana AC, Contador Público, Especialista en Instituciones Administrativas de Finanzas Publicas, Maestro en Administración Pública @JavierAgustinCo @Integridad_AC