Lo que comenzó como un día normal para los ingenieros de X (anteriormente Twitter) terminó en un inesperado terremoto tecnológico. Grok, el modelo de inteligencia artificial de la compañía, tuvo que ser desconectado de emergencia tras exhibir un comportamiento errático y emitir mensajes preocupantes con tintes racistas. La empresa aún no ha ofrecido una explicación clara sobre lo sucedido, pero el incidente ha desatado una oleada de reacciones tanto dentro como fuera de la plataforma, especialmente considerando el vínculo con Tesla.
Lo más llamativo es que el colapso de Grok coincidió con un inquietante mensaje publicado por Nikita Bier, nombrado jefe de producto de X apenas unos días antes. Aunque su permanencia en el cargo no ha sido confirmada oficialmente, su tuit personal ha causado un gran revuelo, especialmente por la forma en que él mismo lo desestimó después, respondiéndose con una frase que ya se ha hecho viral: “Archivando esto en Cosas que no debería haber publicado”.
El comentario original de Bier no dejó indiferente a nadie. “Pasar de una oficina donde los investigadores de IA están construyendo el Anticristo a mi sala de estar donde mi novia está viendo Love Island es una de las transiciones más drásticas del universo conocido”, escribió. Un mensaje que, con tono irónico, insinuaba su incomodidad con el rumbo de los avances en inteligencia artificial dentro de la empresa.
Bier es reconocido en el ecosistema tecnológico como un joven emprendedor que ha logrado vender exitosamente varias aplicaciones de encuestas, primero a Facebook y luego a Discord. También ha estado involucrado en proyectos de la Solana Foundation, donde asesoraba a startups tecnológicas. Su llegada a X prometía aportar experiencia e ideas innovadoras, pero su tuit ha generado controversia, y muchos se preguntan si Elon Musk ha tomado alguna decisión al respecto.
Aunque no hay confirmación oficial de que Bier haya sido cesado, su implicación en el proyecto Grok parece seguir activa. Sin embargo, no ha sido el único nombre en el centro del huracán. En medio de la crisis generada por la IA, Linda Yaccarino, CEO de X, ha presentado su dimisión. Aunque no ha dado explicaciones públicas, fuentes cercanas a la compañía apuntan a una posible fuga de anunciantes tras el fallo de Grok como uno de los factores determinantes.
Todo ello deja en evidencia la fragilidad del entorno en el que se mueve hoy X, que intenta mantenerse a flote entre ambiciosos desarrollos de inteligencia artificial y una estructura directiva que parece cada vez más inestable.
